Después de la experiencia que os conté ayer y mientras todavía seguía en una nube, más o menos como cuando te enseñan el coche o el
piso de tu vida y viene el momento "ahora te digo el precio y te cagas",
pues el final de mi primera visita al gine fue un poco igual.
El gine aprovecha ese momento y empieza a decirte lo que se te acabó a partir de ahora: nada
de alcohol, nada de fumar, evita la cafeína, nada de embutido, carne
cruda, pescado crudo, por lo de la
"toxoplasmosis". Pero bueno!! Esto que es??!!! Que yo tengo que vivir!!!
Como odio esa repetida palabra "toxoplasmosis" que me ha privado de uno de los
mayores caprichos y deleites de nuestra gastronomía: jamón ibérico,
mmmmmmmmmmmmmm!! como te hecho de menos, recien cortadito, en lonchas
finas, encima de un trozo de pan calentito... Que las que entendeis de
esto me direis que con congelarlo, asunto arreglado, pero na na na, no
es lo mismo y lo sabeis. Y otra de mis privaciones: la cerveza,
ahhhhhhhhhhhhhhh, cervecita con gaseosa, fresquita, mejor en jarra
helada, en una terraza, con unas tapitas, dios! como hecho de menos la
cerveza... La 0,0 no me vale, esto es como lo de congelar el jamón, no
is the same...
Y no contento con esto, el señor gine sigue con la lista de pruebas varias que me esperan por delante... maaaaadre mía!
parece que nos estemos preparando para ser astronautas más que para
tener un bb. Yo, que me mareo viendo Crepúsculo, y me dicen que me
tienen que pinchar cuantas veces??? el test de o' que??? venga ya!!! Y
si se lo hacen al padre no vale??
Aún asi, me quedo
con el momento en el que salí como levitando de la consulta, con la foto
de mi bb en la mano y oyendo todavía el latido de su corazón, mientras
le decía a marido que todo lo piensa y razona: "anda que..ya te vale, no haber entrado...lo que te has perdido!!!!"
Aquí un pequeño homenaje a mi aperitivo favorito, lo veré pero no lo cataré durante unos meses:
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